Llevo varios años analizando el contenido y la forma en que se publican las ofertas de empleo y he visto de todo. Unas que detallan al máximo toda la información y otras que son muy breves en su descripción. A veces las publica la empresa contratante y son ellos los que te llaman directamente para la entrevista, y otras veces las gestiona un intermediario que se encarga de todo el proceso de selección. Hay ofertas en las que sabes desde el principio para qué empresa vas a trabajar y otras completamente confidenciales.
Al fin y al cabo, son muchas las empresas contratantes y cada una tiene su forma particular de hacer las cosas, pero, como siempre me ha llamado mucho la atención el tema de la confidencialidad, te animo a reflexionar sobre las ventajas que obtienen las empresas usando la opción confidencial y también sobre sus inconvenientes:
Ventajas para la empresa:
- Consigue ser invisible de cara a sus competidores. Muchas veces la empresa no quiere que su competencia tenga detalles sobre sus actuaciones internas, es decir, qué necesidades tiene de personal, qué perfiles están buscando, qué salarios están manejando… Prefieren dar esta información al candidato una vez entre en el proceso de selección y así evitan una divulgación que consideran excesiva.
- Evita dar pistas a sus propios empleados. Quizá la empresa ha tomado la decisión de despedir a una persona y quiere empezar el proceso de selección antes de que se produzca la salida del trabajador. La única opción para que esa persona no se entere de las futuras intenciones de la empresa para la que trabaja, es publicar la oferta sin mencionar el nombre de la empresa.
- Permite hacer estudios de mercado. Imagina que una empresa quiere abrir su nueva fábrica en una localización concreta y quieren averiguar si dispondrán allí de mano de obra cualificada, saber qué porcentaje de trabajadores estarán dispuestos a ganar un determinado salario o incluso simplemente tener una base de datos de posibles candidatos disponibles para contactar en un futuro.
Inconvenientes para la empresa:
- Cuanta menos información se detalle, menos se identificará el candidato con la oferta y menos probabilidades habrá de engancharle (o convencerle para que se inscriba) y, por tanto, se reduce la atracción de talento.
- Disminuye la confianza del candidato y aumenta las posibilidades de que desista ya que, por ejemplo, puede pensar que se trata de una oferta falsa cuyo único fin es recabar información personal para realizar posteriormente campañas de spam.
Antes de terminar me gustaría contarte un caso curioso. En ocasiones, en lugar de inscribirte, te piden que mandes tu CV a la dirección de email que facilitan. Bien, lo curioso es que, he visto cómo la empresa X pide que le envíes el CV a un email que no es corporativo. Es decir, en vez de mandarlo a rrhh@empresaX.es debes enviarlo a empresaX@gmail.com en su lugar. En otras palabras, la oferta no es confidencial (indican que son la empresa X en su descripción), sin embargo, no utilizan su dominio… ¿por qué? ¿significa que la empresa no tiene email corporativo? Si esto es así, es decir, si la compañía no tiene email propio, mi recomendación sería crearlo cuanto antes, por tres motivos:
- El candidato no tiene la certeza de estar enviando sus datos a la empresa en cuestión y, muy probablemente, prefiera no enviar nada.
- El hecho de no tener un email propio puede percibirse como algo cutre o descuidado y puede que ahuyentes a un candidato potencialmente perfecto para el puesto. Es decir, un candidato que busque la excelencia, alguien que sea el mejor en su área y que no se conforme con un puesto de trabajo cualquiera, nunca querrá trabajar en una empresa que parezca mediocre.
- Hoy en día si quieres ser una empresa competente, debes tener una página web y, por supuesto, un dominio corporativo. Sobre todo, en el caso de Pymes.
Al final, los pequeños detalles también cuentan a la hora de escoger un puesto de trabajo u otro, porque en realidad el candidato también decide dónde quiere trabajar y hace un ejercicio interno de reflexión completo antes de tomar su decisión.
Y tú como empresa, ¿prefieres publicar ofertas confidenciales?
Y tú como candidato ¿te generan desconfianza las ofertas confidenciales? Si es confidencial, ¿te sientes igual de atraído por el puesto? Si te encuentras con un email no corporativo, ¿les mandarías tu CV?