Independientemente de a qué nos dediquemos, hay competencias que son transversales y nos resultan útiles y adaptativas a todas las personas, ya sea en el ámbito profesional o el personal. La escucha activa es una de ellas, es la llave para identificar necesidades, para negociar, para vender, para encontrar soluciones, para amar. En definitiva, para relacionarnos con éxito. Sin embargo, muchas veces tenemos tanto ruido alrededor que no podemos oír, y se hace necesario buscar un espacio libre de ruido y concedernos el tiempo para escuchar.