La respuesta es: mucho
Cada día somos manipulados a través de la información, de la autoridad, de todo lo que nos llega desde fuera e imprime en nosotras (os) una necesidad, un deber, un juicio moral o religioso, etc.
Una falacia es un razonamiento incorrecto con apariencia de razonamiento correcto.
Es un error de pensamiento. Una supuesta verdad que en realidad obedece a intereses varios y que repetimos como absoluta.
Lo hacemos sin darnos cuenta y la recibimos del mismo modo, la mayoría de las veces sin cuestionar su veracidad.
Sin embargo, las cosas no sólo «son como son» Y vivir una experiencia condicionada por falacias, la vuelve limitada y limitante.
Es posible sacarse de encima estos condicionamientos y la manera es pensando, cuestionando y finalmente abandonando creencias que impiden desarrollar nuestro verdadero potencial y nos reducen al seguimiento ciego de supuestas verdades universales.
Plantearnos si lo que pensamos, hacemos o decimos tiene que ver realmente con nuestro ser o con lo que nos han dicho que somos.
Por ejemplo ¿Sabrías reconocer tus falacias personales? ¿O las que has estado aceptando y repitiendo a lo largo de tu vida?
¿Cuáles son las que más te suenan?